Hostemplo comenzó en 2009, a tan solo unos pasos de la Sagrada Familia. Fue el resultado de una visión compartida entre Carlos Ruiz y Mila—pareja en aquel entonces, ahora socios en un proyecto que ha crecido con corazón y dedicación. Carlos, arquitecto oriundo de La Rioja que se trasladó a Barcelona a los 17 años, dio vida a su pasión por el diseño de interiores, creando espacios funcionales y llenos de carácter. Mila, nacida en Extremadura pero criada en Barcelona, se convirtió en la fuerza creativa del proyecto. Desde la decoración y la limpieza hasta la gestión del café, su toque personal está presente en cada detalle. Lo que empezó como una acogedora y vanguardista casa de huéspedes con solo 10 habitaciones pronto evolucionó. La apertura de los Hostemplo Apart-Suites marcó el siguiente capítulo, y en 2015, el lanzamiento del Hostemplo Boutique Hotel consolidó la marca como una de las favoritas locales para estancias urbanas y acogedoras en el corazón del Eixample barcelonés. Pero la historia no terminó ahí. La siguiente generación se sumó. Miquel Ruiz, hijo de Carlos y Mila, creció entre recepciones, mostradores de check-in y turnos de desayuno. Empezó a colaborar en el negocio familiar a los 14 años, aprendiendo cada rol desde la base. Tras obtener su título en Turismo y Dirección Hotelera en el CETT – Universidad de Barcelona, y pasar un tiempo en Italia gracias a un intercambio Erasmus, Miquel regresó con una perspectiva internacional y renovada. Hoy, Miquel lidera Hostemplo con una energía renovada, combinando sus raíces familiares con un enfoque en la innovación, la transformación digital, la sostenibilidad y un crecimiento consciente. Hostemplo es más que un lugar donde alojarse. Es el resultado de un viaje familiar—impulsado por el diseño, la hospitalidad y un genuino amor por las personas. Un proyecto con alma, nacido a la vuelta de la Sagrada Familia y con la mirada puesta firmemente en el futuro.